La compra de un carro usado puede estar motivada por distintos factores que involucran la economía personal. El alza del precio del dólar y lo incierto del panorama local pueden incidir la decisión. Aunque a primera vista puede parecer que no es una inversión segura, hay que tener en cuenta que hay personas muy cuidadosas que venden sus vehículos en buen estado.
Buscar opciones y analizar riesgos
Definitivamente, existe un amplio mercado de carros usados en Colombia. Al mismo tiempo, podemos encontrar quienes están renovando su coche y cuidaron al anterior como si de un hijo se tratara. Por eso, compartimos estos consejos para que puedas tomar una decisión segura:
- Revisa la cantidad de kilómetros recorridos y equipáralos con el año de fabricación para determinar si ha tenido un uso excesivo. Siempre ten en mente que no es posible garantizar un buen funcionamiento a largo plazo de un auto que ya ha tenido un recorrido considerable durante su vida útil.
- Tomar en cuenta el estado de la pintura. Tómate un tiempo prudencial para establecer realmente en qué condiciones encuentras la pintura. Defectos menores recurrentes, el brillo perdido o la presencia de óxido pueden ser factores que determinen un síntoma de peligro.
- Pide el historial del automóvil. Aunque es poco común, existen propietarios que han sabido ser cuidadosos y tienen un archivo detallado con toda la documentación del carro. Solicita este archivo si está disponible. En él encontrarás la información referente al mantenimiento que ha recibido, los cambios de aceite y otros detalles importantes. Más allá de ello, podrás verificar que los documentos del vehículo estén en regla antes de cerrar el trato.
- Los rines, las llantas y la cojinería deben estar en buen estado a simple vista. Estos elementos son el rasgo más visible para definir si su anterior dueño lo ha cuidado adecuadamente. Si a pesar de esto te interesa ese auto, considera que una conservación deficiente de estos elementos debe verse reflejado en el precio final y es un factor que abrirá las puertas a la negociación.
- Enciende el motor con el radio apagado. Al adquirir un vehículo de segundo uso debes prestar mucha atención a los detalles visibles y sonoros que puedan darte una señal de peligro. Es por ello que al momento de encender el motor debes hacerlo sin ruidos externos que te eviten escuchar cualquier sonido fuera de lo normal que se presente.
- Realiza evaluaciones al vehículo. Lo recomendable es conducir el carro y probarlo en distintos lugares, como caminos rizados, pendientes, policías acostados, dar giros a ambos lados y en U. Esta sencilla prueba te permitirá delimitar el estado de la dirección y suspensión, así como para evaluar si responderá ante el tipo de uso que necesitas darle.
- Pide un certificado de tradición al vendedor. La informalidad del mercado de compra y venta de carros usados en el país se presta a muchas situaciones que pueden terminar en una sorpresa desagradable. Con este documento podrás saber con claridad si el coche que te interesa tiene alguna orden de embargo o si ha sido ofrecido como garantía por algún concepto.
- Constata si tiene una póliza de seguros vigente. Este es un factor fundamental para conocer un poco más sobre el historial del futuro miembro de la familia. Existen autos usados que no son aceptados por las compañías de seguro debido a que han sufrido choques que afectaron gravemente su estructura. Si no tiene muchos años de antigüedad, date al trabajo de verificar que sus revisiones se hayan realizado puntualmente y en un taller autorizado por el fabricante. Este punto te permitirá si conocer si aún mantiene la garantía original.
- Busca una mejor opción si observas daños en la carrocería. De ninguna manera es una buena idea adquirir un coche que ha participado en un choque grave y, peor aún, que la carrocería no haya sido reparada siguiendo las normas de seguridad necesarias. Si la parte estructural está dañada, tarde o temprano terminará teniendo problemas con su funcionamiento y desempeño.
- Averigua cuándo le corresponde su próxima revisión. Si sabes de antemano que la fecha está cerca, indaga respecto a los costos y el tiempo que se requiera para que tengas un valor referencial que te permita negociar con el vendedor.
- Documentos al día. Revisa con cuidado y si es posible, con la asesoría de un profesional, si la Sala Técnica de Identificación de Automotores de la DIJIN, tiene registrado el vehículo cumpliendo las normas legales del caso y si toda la documentación está en regla.
- Solicita un peritaje. La mayor parte de las personas que quieren adquirir un auto usado no cuentan con los conocimientos y la pericia para tomar una decisión tan importante por sí solas. Debido a esto, te recomendamos pedir la opinión de un experto que lleve adelante una evaluación detallada del auto y descarte cualquier inconveniente tanto mecánico como estructural y de documentos. Muchos intentos de fraude han quedado al descubierto al realizar esta prueba.
- No confíes en los precios demasiado bajos. Si encuentras el vehículo de tus sueños a un precio demasiado bajo, enciende las alarmas y actúa con mucha precaución. La mayoría de estos carros tienen problemas en la documentación que pueden terminar por afectarte. Debes tener el doble de cuidado en que los papeles estén en regla y que no sean falsificados antes de comprar o dar un anticipo.
- Finalmente, si ya llegaste a la conclusión que tu próximo auto será uno usado, lo mejor es hacer la compra en un lugar reconocido o a través de concesionarios legalmente establecidos y confiables. El mejor valor que encontrarás en estos establecimientos es la seguridad. En ellos tendrás la certeza de la legalidad del automóvil y de la veracidad de su estado, debido a que ahí ya realizaron todas las evaluaciones de las que hablamos líneas arriba.
Más allá del estado del carro que piensas adquirir, esta es una inversión importante en la vida de cualquiera y es preferible evitar problemas y sorpresas desagradables luego de haber cerrado el trato.
