El cuidado constante de tu carro es fundamental para su buen funcionamiento, y aún más para que cada una de sus piezas se mantenga como el primer día En Colwagen sabemos que, para lograr una calidad óptima, la diferencia está en los pequeños detalles.
1. Cuida la batería
Lo principal para que la batería de tu carro esté como nueva es que mantenga los niveles de líquido requeridos para su función. Por eso te recomendamos que, si la batería de tu carro ya tiene algunos años, compruebes su estado cada tres meses.
2. Mantén la pintura como nueva
La apariencia es muy importante y la de tu carro no es la excepción. Para mantener una pintura como si fuera la del primer día, te sugerimos encerarlo al menos dos veces al año. Esto mejorará su aspecto estético y lo protegerá de factores ambientales que puedan deteriorarlo. También es conveniente que en épocas de mucho sol lo cubras con una lona.
3. Revisa tus llantas
El buen estado de las llantas dependerá en mantener una adecuada presión de aire de los neumáticos cada vez que las vayas a calibrar. La clave aquí es revisarlas cada cierto tiempo y así comprobar su desgaste o algún tipo de imperfección, como agujeros.
4. Una buena iluminación es esencial
Además, es uno de los mantenimientos más económicos si buscas mantener tu carro como nuevo. Para lograrlo solo es necesario comprobar su estado todos los meses, tanto de las luces delanteras como las traseras. No te costará nada, ya que solo tienes que ver por ti mismo que se encuentren bien y hacer alguna limpieza puntualmente con una toalla de microfibra.
5. Cojinería como si fuera el primer día
Si tienes asientos de cuero, la mejor manera de mantenerlos correctamente es hidratarlos con un acondicionador especial y una toalla de microfibra para que no deje residuos. Lo primero es limpiar y retirar toda la suciedad, y luego, con mucho cuidado, aplicar el producto con la toalla de microfibra. Déjalo actuar por unos minutos y retira el exceso. Si se trata de asientos de tela, tendrás que pasarles una aspiradora con regularidad.
6. Mantén tus frenos en buen estado
Al hablar de frenos, hay dos elementos a los que tienes que prestar atención: los discos y las pastillas en las ruedas. Lo normal es que tu vehículo cuente con un indicador luminoso que te informe cuando es necesario cambiar las pastillas. En caso de no tenerlo, podrás comprobarlo tú mismo mediante el desgaste del líquido de frenos, ya que este es proporcional al desgaste de las pastillas. En cuanto a los discos, si sientes ruidos y vibraciones al frenar, límpialos y engrásalos. Si estas molestias continúan, deberás cambiarlos.
7. No aceleres de forma brusca
Tampoco frenes de una forma extrema. Así mantendrás en buen estado la transmisión, suspensión y el sistema de frenado por mucho más tiempo.
8. Revisa el aceite
Comprueba el estado del aceite de tu carro constantemente, y cada vez que vayas a reponerlo, recuerda utilizar el mismo tipo de aceite que la vez anterior.
9. Cambia los pretensores
Es recomendable que sustituyas estos elementos cada diez años, o en caso de que se hayan activado.
10. Usa repuestos originales
Estas piezas son 100% compatibles con tu coche y además siguen los estándares del fabricante. Esto se traduce a que los tiempos de reparación sean más cortos y la mano de obra más barata.
Como ves, mantener tu coche como nuevo es una tarea de todos los días. Piensa que, si le dedicas pequeños cuidados a lo largo del tiempo, la calidad y estado de la primera vez se mantendrá para tu disfrute.
